No viniste de lejos
Viniste de tan hondo
que conozco tu nombre,
conozco tu dolor,
reconozco tu alma.
No viniste de lejos,
ni siquiera has llegado.
Estabas desde siempre,
como un lenguaje escrito
en el fondo de mí,
y te estoy descifrando.
Por primera vez...
Por primera vez
he pintado mis labios.
Les quité su sabor y su forma.
Porque quiero que rían,
disfrazados de fiesta.
Que brillen por las calles,
y me lleven de paseo
a donde no conozco.
A donde no me atrevo
a besar
con mi boca desnuda.
Me levanto del agua de la noche...
Me levanto del agua de la noche
deseosa de ti.
Despedazada.
7 comentarios:
wao!!! Carmen, gracias por compartirlos
me encantaron
saluditos
Sí, wao... Ellas lo dicen todo tan bien que resulta hasta absurdo pretender escribir.
Saludos.
A veces tienes tintes de Claribel Alegría y en este poema concretamente, todavía más.
Un beso volador
¡Es Renata Durán!
Me dí cuenta tarde... jajajaja
Bueno, pues otro beso volador
Unos versos bellísimos.
Gracias por compartirlos con todos nosotros.
Un beso.
S.
Te aseguro, Alicia, que me halaga que pienses que estos versos los podía haber escrito yo, jejeje... Y me encanta Claribel Alegría, me alegra que la conozcas. Besote. (No me olvido de ti).
Gracias a ti Soledad por perderte por aquí.
Un abrazo.
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