De repente, después del cansancio, la lucha, el desasosiego, una tremendísima paz... Y el vértigo de no saber, una vez más, qué va a ser de mi vida... Dónde voy a trabajar... qué va a suceder... Y lo peor es que ese vértigo casi me gusta.
El vértigo puede ser motor, caida hacia arriba, nuevo alimento... sólo hace falta encontrar el espacio justo donde invitarle a pasar la noche, la arruga ideal para mecerlo...
Siempre gusta el vértigo de lo desconocido sólo que este es tremendamente peligroso, espero que no lo sea para ti. Te deseo lo mejor. Mis mejores vibraciones. Un abrazote.Tino
Estoy de acuerdo contigo Marián... El vértigo puede ser positivo pero también tremendamente negativo, en mi caso, que ya lo he vivido en más de una ocasión, casi siempre ha resultado estupendo... Espero que ahora también lo sea.
6 comentarios:
El vértigo puede ser motor, caida hacia arriba, nuevo alimento... sólo hace falta encontrar el espacio justo donde invitarle a pasar la noche, la arruga ideal para mecerlo...
Un beso
Marian
Siempre gusta el vértigo de lo desconocido sólo que este es tremendamente peligroso, espero que no lo sea para ti. Te deseo lo mejor. Mis mejores vibraciones. Un abrazote.Tino
Carmen... tienes un regalito en mi blog, al final de la barra lateral... porque te lo mereces.
Mil besos
Marian
Estoy de acuerdo contigo Marián... El vértigo puede ser positivo pero también tremendamente negativo, en mi caso, que ya lo he vivido en más de una ocasión, casi siempre ha resultado estupendo... Espero que ahora también lo sea.
Gracias. Y besos.
Gracias por las vibraciones, Tino... Creo que el vértigo es, a veces, casi necesario, para no dejarse morir en vida...
Otro beso para ti.
Ya ví tu regalo, Marián...lo recojo como se merece... con muchísimo cariño...
Más beso grandes para ti.
Publicar un comentario