martes, 27 de noviembre de 2012

Un poema de Sharon Olds



¿Cómo lo pueden hacer, los que hacen el amor sin amor?
Bailarines hermosos,
deslizándose como patinadores
sobre el hielo, con los dedos engarzados
a sus cuerpos, de caras enrojecidas
como el bistec y el vino, mojados
como los niños abandonados por sus madres al nacer.
¿Cómo pueden llegar al instante
del instante mismo de los dioses, llegar a las aguas tranquilas,
sin amar al que llega con ellos, ligeramente
elevándose como el vapor de los cuerpos juntos?
Ellos son los místicos verdaderos,
los puristas, los duros que no van a aceptar
al falso Mesías, ni a confundir al sacerdote
con Dios. Ni al amante con su propio placer;
como los mejores atletas, saben que están solos
frente a la pista, con el frío, el viento,
las zapatillas bien amarradas y el corazón
en su puesto -circunstancias y factores solamente, como su pareja
en la cama, y no la verdad: el cuerpo solitario en el universo,
compitiendo con el mejor instante de su vida.

Sex without love

How do they do it, the ones who make love
without love? Beautiful as dancers,
gliding over each other like ice-skaters
over the ice, fingers hooked
inside each other's bodies, faces
red as steak, wine, wet as the
children at birth whose mothers are going to
give them away. How do they come to the
come to the come to the God come to the
still waters, and not love
the one who came there with them, light
rising slowly as steam off their joined
skin? These are the true religious,
the purists, the pros, the ones who will not
accept a false Messiah, love the
priest instead of the God. They do not
mistake the lover for their own pleasure,
they are like great runners: they know they are alone
with the road surface, the cold, the wind,
the fit of their shoes, their over-all cardio-
vascular health--just factors, like the partner
in the bed, and not the truth, which is the
single body alone in the universe
against its own best time.

Traducción de Juan Carlos Galeano

6 comentarios:

Desconcierto dijo...

He disfrutado -de verdad- tanto con todo lo que has escrito desde que un día la suerte hizo que te conociera que a veces necesito agitarte, para que cuentes lo que sientes o lo que sienten los demás, que escribas, que dejes una foto, una recomendación de cine, de música...y es que te echo de menos...sencillamente.

Eres grande Carmen...

besos, muchos
y gracias por venir con un poema 'no-tuyo'

Faro dijo...

Pues no lo sé, yo nunca he hecho el amor sin amor, y ahora menos que nunca. Supongo que esta mujer, que es de mi quinta, sabe de qué habla, yo pertenezco a otra tribu: la de los se lanzan abismo abajo hasta los pliegues de la falda de una muchacha aunque le vaya la vida en ello y la pierda. Creo que el sexo con amor es un estallido que obliga a cerrar las ventanas a los vecinos; lo otro, el sexo como maquinaria de dos pubis que se suman porque sí, puede ser una baile hermoso, pero no veo el intríngulis por el que sólo ellos se apropien del misticismo y la pureza, será que yo esté perdido en la traducción, la traducción de la poesía de Auster supuso su ruina lírica. Nada como lo indígena o las V. O.
Y mira que yo siempre he adorado al dios del sexo y la intimidad de esas embestidas en las que no hace falta ni conocer los nombres verdaderos. El placer por el placer es un terremoto, sí. Pero el placer cosido al amor es la hostia.
Y dicha estas majaderías, propias del candor de la ancianidad y haber vivido lo más robusto de la vida en otro siglo sin olvidarse de dejar lo mejor para este, creo que debo aclarar una cosa: me gusta infinitamente más Carmen que Sharon.
Así que abandona los refugios, querida amiga, y entrégate ya mismo al viento, al tuyo propio, ese que a mí me arrebata los acérrimos tabiques de la abstracción y me pone emocionalmente a cien. No he conocido una poesía con huella más tierna que tu personal interpretación de la vida, tan lejos de la pólvora y el método y tan cerca de ese dios que no existe pero que en tus manos bien lo merecería.
No sabes cómo te estoy echando de menos.

Un beso.

Carmen dijo...

Y yo te lo agradezco porque tal vez no sean los mejores tiempos para la lírica- ni en mi vida ni en la vida en general- pero a veces me olvido de que tengo derecho a "buscar" y "buscarme" dentro de las pocas cosas que me hacen feliz y que son esas, precisamente: una película, una canción, un poema... Y, sobre todo, el compartirlo. Toda mi vida lo he compartido todo, mucho antes de tener un blog ni de haber escrito ni un sólo poema... Y el que eres grande eres tú que te has portado siempre a una altura que ni a la suela de los zapatos te llego. Besazos (y, ah, escribí un poema,je, a lo mejor gracias a ti).

Carmen dijo...

Indudablemente si a todos nos dieran a elegir, elegiríamos el sexo con amor pero para algunos no resulta tan fácil sentir amor y, por lo tanto, a veces, el sexo sin amor es igual de válido o, incluso, más. También puede uno inventarse que ama mientras lo practica, es otra solución... después de todo "qué es amor", "qué es aprecio", "qué es cariño", "qué es afecto"... Cada uno bautiza a los sentimientos con el calificativo que quiere o puede, o se inventa... porque mientras "practicas sexo", casi siempre amas, aunque sea sólo las ganas de vivir. Y Sharon Olds me encanta como mujer, independientemente de que haya sido y sea una excelente poeta, también ha sido y es una mujer valiente y con un talento para la vida que está fuera de toda duda. Y precisamente porque ya ha vivido bastante se puede decir eso de ella... porque una vida no se puede admirar hasta que no tiene un recorrido. O eso pienso.

estrella dijo...

Hola Carmen!!!!
Me alegro tanto de verte...perdona mi tardanza pero por fin llego y leo tus palabras, te miro esa fotografía que tienes ahí y te sonrío(nada, una tontería más de las mías).

Muy buen poema, cada cuál hace lo que puede, no??, pero bueno, yo sé que sin amor no podría hacer el amor

Un enorme abrazo con mi cariño de siempre, preciosa!!!!

Carmen dijo...

Hola Estrella,

Qué bien que vengas y le des un poco de vidilla a ésto que anda últimamente de capa caída... Lo del sexo sin amor daría para una conversación que podría durar años... Yo sí pude en su día tener sexo sin amor pero cuando la gente oye eso se imagina una cosa salvaje y carente de delicadeza o sensibilidad alguna y para nada es así... al menos no es esa mi experiencia... Es más si pudiera hablar, jeje, te contaría un secreto...

Un besote, guapa. Y gracias por no olvidarte del todo de mí.