miércoles, 1 de octubre de 2008

No sé si odiar es malo

Detestar es una palabra grande, inmensa... desagradable, incluso. Quien más y quien menos se ha criado en la cultura "cristiana" que condena los malos sentimientos... poner la otra mejilla y esas cosas... Yo estudié con monjitas, soy una víctima de éso. Pero siempre recuerdo lo que una vez me dijo un amigo: a la gente hay que devolverle lo que te da multiplicado por dos (como mínimo). Si te da un abrazo, tú le das dos, si te da una patada en el trasero, tú otras dos.
No atravieso buen momento, sobre todo buen momento laboral. Durante diez horas al día mi vida es un infierno en el que detestar se ha convertido en el sentimiento protagonista.
Por primera vez le deseo el mal a alguien... detesto, odio y sé que el odio es un sentimiento inútil pero a veces libera.

1 comentario:

Ana Clavero dijo...

Siento que estés pasando estos momentos y también siento que mis tejemanejes de salud no me estén dejando tiempo para regalárte un poquito de ánimo.

Cuídate mucho, reina.

Un besazo