El mismo juego de hacer versos
-que no es un juego- es algo
parecido en principio
al placer solitario.
Jaime Gil de Biedma
Si son días de gloria lo que buscas,
días de pan y sol,
aparta la mirada de este cuerpo
porque detrás de su sudor no hay nada.
Apenas una esquina sin relojes,
apenas un resquicio de veneno
un espacio inventado por la sed.
Aprende a contemplar su luz nocturna
antes de que el segundo se duplique
y el mismo juego empiece en otro nombre.
2 comentarios:
detrás de su sudor no hay nada.
Apenas una esquina sin relojes,
apenas un resquicio de veneno
un espacio inventado por la sed.
Versos contundentes, impresionantes. Como siempre me emocionó el poema. Un abrazo. Tino
Tal vez demasiados contundentes... los versos, digo, quién sabe...
Es un gustazo tenerte por aquí, Tino.
Besotes,
Carmen
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